Padre de un niño y futbolero: quién era el playero asesinado en Rosario para amenazar al gobernador Pullaro
Bruno Bussanich, de 25 años, era padre de un pequeño y amante del fútbol. El playero fue asesinado a balazos en una estación de servicio en la que los atacantes dejaron un mensaje al gobernador.
El crimen de un joven playero en una estación de servicio conmociona a la ciudad de Rosario, en el marco de otros crímenes y ataques ocurridos en la última semana y de un mensaje escalofriante dirigido hacia el gobernador Maximiliano Pullaro y el ministro de Seguridad, Pablo Coccoccioni.
Padre de un niño de dos años y ferviente hincha de Rosario Central, Bruno Bussanich, de 25 años, trabajaba en la estación de servicio de Mendoza y Rojas. Además, según su perfil de Linkedin, buscaba oportunidades más acordes con sus aspiraciones en el ámbito técnico y electromecánico.
En esa red social escribió lo siguiente: "estoy preparado para realizar todo tipo de tareas del área técnica, esto abarca desde interpretar y/o realizar planos, hasta utilizar un torno o una fresadora (computarizados o no). Me gusta el trabajo en equipo, mi objetivo es adquirir experiencia para formarme como profesional".
También, había acumulado más de dos años y medio de experiencia en una gomería, un año en un lubricentro y se había desempeñado como auxiliar mecánico en un taller.
El crimen y una nota amenazante
Un grupo de sicarios asesinó a balazos al playero y en la escena del crimen dejó una nota de advertencia dirigida al gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, y al ministro de Seguridad, Pablo Coccoccioni. "Vamos a matar más inocentes".
El hecho ocurrió en la estación de servicio Puma Cita, ubicada en las calles Mendoza y Rojas. Allí, la Policía tomó conocimiento de la presencia de un hombre fallecido en el lugar tras haber recibido disparos de arma de fuego en el cráneo. La víctima fue identificada como Bruno Busanich, de 25 años.
Los investigadores no descartan la posibilidad de que el asesinato de Bussanich esté relacionado con los recientes homicidios de taxistas y el ataque al chofer de trolebús en Santa Fe. La hipótesis sugiere que estos actos violentos buscan generar conmoción en respuesta a las medidas de seguridad en las cárceles provinciales y a las acciones del gobernador Maximiliano Pullaro.