Los torturaron y prendieron fuego mientras estaban con vida: detuvieron a nueve sicarios
Se trata de ocho hombres y una mujer, sospechosos por su presunta vinculación con los asesinatos de Silvio David Vitullo y Diego Fabián Segura. Investigan una venganza narco.
A casi dos años del salvaje crimen de dos mecánicos de la zona de Longchamps, detuvieron a nueve sospechosos que habrían sido contratados para cometer el doble crimen por un peligroso narcotraficante, en venganza por el presunto robo de una camioneta.
Se trata de ocho hombres y una mujer que fueron detenidos en las últimas horas en medio de una serie de trece allanamientos en la zona sur del Gran Buenos Aires y también en la ciudad santafesina de Rosario.
De acuerdo a la causa, que estuvo a cargo de la Dirección de Investigaciones Contra el Crimen Organizado y efectivos de Gendarmería Nacional Argentina (G.N.A.), los detenidos asesinaron a Silvio David Vitullo y Diego Fabián Segura en diciembre de 2022. A ambos hombres los prendieron fuego mientras todavía estaban con vida dentro de un auto que apareció en la localidad de Guernica.
Según esta hipótesis, la orden criminal partió de Fabián Gustavo "Calavera" Pelozo, un jefe narco que actualmente cumple condena en el penal de Ezeiza, por el robo de una camioneta Toyota SW4 que era de su propiedad, ocurrido un mes antes de los homicidios.
Durante los operativos, confirmó una fuente cercana a la investigación a Crónica, secuestraron una camioneta Ford EcoSport y un VW Gol Trend blanco (usados por los sospechosos al momento del crimen), dos revólveres, una notebook, autopartes y al menos diez teléfonos celulares.
La hipótesis del ajuste de cuentas
Para los investigadores, todo comenzó el 24 de noviembre de 2022 con el robo de una camioneta del estacionamiento de la cárcel de Ezeiza. En ese vehículo habían llegado dos cómplices de Pelozo para visitar a su líder, y se cree que en su interior había una importante suma de dinero, lingotes de oro y drogas.
El robo habría sido el disparador de la venganza del narcotraficante condenado, quien habría entonces ordenado a su gente que buscaran a distintas personas que, en el sur del conurbano, estuvieran relacionadas a las bandas dedicadas al robo de vehículos.
El relevamiento de los delincuentes puso como objetivo del ajuste de cuentas a Vitullo y Segura, a quienes citaron mediante un engaño el 10 de diciembre del mismo año en una casa del Barrio El Triunfo.
Ese día las víctimas fueron secuestradas, torturadas y finalmente prendidas fuego mientras todavía estaban con vida. Sus cuerpos carbonizados fueron encontrados el 11 de diciembre en la parte trasera de una camioneta Citröen Berlingo incendiada en un descampado ubicado en el cruce de la avenida Néstor Kirchner y la ruta provincial 16.(TN)