Horacio Huecke sigue ayudando con ferias: "Entré a casas de las cuales salí destrozado"

Pasan los años y Horacio no tiene límites para ayudar. Siempre se las rebusca para generar  una iniciativa con la cual ayudar a los que menos tienen y ahora sostiene ferias solidarias que realiza todos los fines de semana, en el quincho de su papá.

Y claro. Es que toda la familia Huecke parece haber heredado la característica solidaria que sólo tienen aquellos que son concientes de lo importante que es ayuda siempre que se pueda.

En este sentido, y en la previa de lo que es otro fin de semana de feria (Mendioroz 9, esquina La Rioja en Río Gallegos), Horacio dialogó con el programa "Arriba el Día", que se emite por Radio Nuevo Día para contar el trabajo que están realizando, siempre ad honorem, para los más necesitados.

Respecto de eso, Horario afirmó: "Dios nos ayudó y nos puso en la mente hacer esta feria. Nosotros nunca habíamos hecho una feria, no sabíamos ni cómo era, ni cómo nos iba a ir. Y bueno, después de dos ferias, como dijiste anteriormente, juntamos 1.200.000 pesos, que bueno, fue todo trasladado a compra de vibres. Ayer terminamos de entregar y todavía nos quedan algunas bolsas, más de 120, 130 bolsones de comida. Y realmente fue muy buena y bueno, siempre todo esto fue por la donación de la gente, la ropa que nos donó. Así que dijimos, bueno, vamos a tener que repetirla."

Luego agregó que tomó esta iniciativa ante el paso del tiempo, en el que siempre pidió a mucha gente para ayudar: "A mí ya me da vergüenza manguear amigos, manguear comerciantes, que los vengo mangueando hace años y ya no da para manguear a todo el mundo. Y entonces, bueno, esto fue una manera de decir, bueno, siempre tenemos una ropita guardada en el placar que nos sobra. Hoy lo que tenemos impresionante. Si yo tuve ropa el primer día de la primera feria, ahora tenemos el doble. No tenemos cómo acomodarla, no tenemos lugar físico, ni mesa, ni lugar para acomodarla de la cantidad de gente que nos llevó ropa y ropa muy nueva."

Horario sostiene que "esto es un circulo" y que por eso siempre insiste en la frass "entre todo Podemos"

"Esto de entre todo Podemos porque esto es un circulo que va para un lado y para el otro y ayuda a todos. Vos fijate, nosotros nos han venido a comprar un montón de feriantes y yo me alegro porque ellos revenden lo que nosotros revendemos. Lo más caro, lo más caro que yo tengo la feria son 6.500 a 8.000 pesos, lo más caro. Es decir, una mejor campero, un tremendo camperón nuevo para chicos, para caballeros, para damas. Eso es lo más caro de todo, un buen saco. Después, todo 2.500, 1.500, todo así, de chicos, 3 por 1.000. Es decir, los precios son muy accesibles", indicó.

También contó que llega un montón de gente que no tenía ni los 1.500 ni los 2.500 pesos. Y esa gente se llevó la ropa igual, se la dan porque ellos se dan cuenta y ven quién les escribe con real necesidad.

EL ORIGEN
Consultado por los motivos que lo llevaron a sostener iniciativas para los que menos tienen, comentó: "Algunos me critican y dicen que es por política o que mañana me voy a presentar candidato a algo y está lejos de mí porque nunca me interesó estar en política. Yo lo hago porque quiero, tengo siete hijos, dos nietos, agradecido de la vida que mis hijos están bien, mis nietos están bien, no les falta nada. Yo vengo de una infancia excelente, mis padres no me hicieron faltar nunca nada, y veo las necesidades que hay acá nomás, cerquita de casa, y veo a los chicos, veo a los abuelos, me la pasan tan mal, el problema es remedio, no sabes la cantidad de remedio que estamos entregando y que nos están pidiendo, y remedio es importante, mucha gente que pidió la bolsita de colostomía, yo en Feria ya vi a tanta gente con ese problema con la bolsita de colostomía, con el problema de la diabetes, con el problema de gente con cáncer, no te imaginas la cantidad de pedido que tenemos de remedio, nunca nos imaginamos eso."

Luego agregó: "Yo he recibido una mano de amigos, de jefes, de gente que nos ayudó. Y yo creo que, como te dije, yo tuve una infancia excelente y mis hijos bien, mis nietos bien, mis padres con 84 años, todos bien. Entonces, hay que devolver un poco en la vida de todo lo que uno tiene. A mí Dios me dio mucho  y hay gente que hoy necesita, y aparte fuera del Estado, porque nosotros somos chiquititos, no podemos llegar a la altura del Estado y no competimos con el Estado para nada, ni municipal, ni provincial. Esto es familia, amigos, y bueno, y uno trata de volver como familia un poco a la que la está pasando mal; es solamente eso, per una vez que entras en esto, no podés salir más. Yo quise salir porque estuve enfermo y salí un tiempo, y cuando me recuperé un poquito tuve que arrancar de vuelta porque la gente tiene tu teléfono y la gente te escribe, la gente me escribe por whatsapp y me dice: "Hoy tomamos el último té boldo hace tres días", y yo conozco a la familia, conozco a esos chiquitos estuve en la casa, entonces sé que hay cuatro chicos y no me están mintiend. Entonces, ¿cómo en carajo te acostás sabiendo que esa gente no tiene para comer, viste? Es bravo."

Para finalizar, expresó: "Me ha tocado entrar a casa, que salí destrozado de todas esas situaciones. Nosotros hoy estamos ayudando a un chiquito con un problema de capacidad. Un chiquito que le hacen bullying todos los días en la calle. Y bueno, estamos tratando de ayudar en lo que podemos, pero esas cosas te matan. Yo lo veo a diario en la calle. La gente, las cosas que te dicen. Es horrible." (El Diario Nuevo Día)