En Santa Cruz también juntan firmas contra la privatización del Banco Nación
Por estos días circula un libro para que los ciudadanos plasmen su rechazo a la medida que planea el Gobierno de Javier Milei.
Aunque el tratamiento de la ley ómnibus por ahora quedó en suspenso, los trabajadores del Banco Nación no piensan quedarse de brazos cruzados mientras avizoran nuevos embates e intentos para privatizar el organismo.
Es por eso que comenzaron una campaña para juntar firmas que rechacen la medida, para enviarlas luego al Congreso.
La iniciativa fue impulsada a nivel nacional por la Asociación Bancaria y es replicada en Santa Cruz, donde también se juntan firmas.
Los trabajadores recibieron en la sede local libros encuadernados con tapa azul, que reafirman el lema que vienen pronunciando los empleados desde que se hicieron públicas las intenciones del gobierno nacional: "El banco no se vende; la Patria no se vende".
La intención es, luego, reunir todos los libros foliados en todas las provincias para llevarlos a la Cámara de Diputados para la apertura de sesiones del 1º de marzo.
Semanas atrás, en Radio Nuevo Día, Jorge Rojas, secretario adjunto de La Bancaria y parte de la mesa de la CGT, argumentó en contra de esta medida, destacando la importancia del Banco Nacional en la inclusión financiera.
"Es el único banco que realiza asistencia al sistema productivo y a las grandes empresas. ¿Qué otro banco ofrece esta asistencia en nuestro país?", cuestionó.
El dirigente gremial también hizo hincapié en la posible pérdida de empleo en caso de privatización. "Si llegan a ese contexto, alrededor de 8.000 a 9.000 compañeros se quedarían sin trabajo. Cuando privatizan, comienzan con un proceso de saneamiento que, en última instancia, busca reducir la plantilla para facilitar la venta", advirtió.
Sin la ley, siguen los intentos
Después de perder el "primer round" en el tratamiento de la ley "Bases", también conocida como ómnibus, el Gobierno sigue con los asaltos para lograr su cometido y privatizar una gran cantidad de organismos estatales.
Al principio había un listado de 41 empresas públicas que podrían pasar a capitales privados. "Con las negociaciones se bajaron a 37 y en 3 de ellas se quería vender el 50%", repasó Nazario.
Como hubo un rechazo de los bloques opositores y la normativa volvió a foja cero, Federico Sturzenegger instruyó al Directorio del Banco Nación a convertir el banco en una Sociedad Anónima y después vender acciones.